¿Qué se necesita para internar a un adicto? Las drogas y el alcohol son sustancias poderosas. La adicción no es un signo de debilidad, un defecto de carácter o un fracaso moral, es una enfermedad común que afecta a millones de personas de todas las edades, orígenes y grupos socioeconómicos. Y aunque no existe una única causa de la adicción, hay esperanzas de que pueda tratarse eficazmente.
La adicción cambia los deseos cotidianos del cerebro por los de la droga a la que se es adicto. Ya no se disfruta de lo que hacen los demás, pues el cerebro cambia. Los cambios comienzan con el reconocimiento del placer y terminan con un impulso hacia el comportamiento compulsivo para satisfacer ese deseo. A veces, cuando intentas dejarlo, la adicción debilita tu capacidad para controlar los impulsos.
La adicción ejerce una larga y poderosa influencia sobre el cerebro de las siguientes maneras:
- Ansia por el objeto de la adicción.
- Pérdida de control sobre su consumo.
- Implicación continuada con él a pesar de los problemas que causa.
En la adicción a las drogas y al alcohol, las sustancias secuestran el sistema de recompensa del cerebro.
Algunas personas desarrollan síntomas físicos desagradables y a veces peligrosos cuando dejan o disminuyen el consumo de sustancias. Estos cambios dan lugar a una capacidad debilitada para controlar los impulsos a pesar de las consecuencias negativas.
El abuso de sustancias puede provocar graves problemas físicos, emocionales y sociales. Por ejemplo, el consumo continuado de drogas o alcohol puede llevar a la pérdida del trabajo, a la ruptura de relaciones y a otros fracasos. Estos problemas suelen aumentar el estrés y la ansiedad.
La adicción rara vez actúa sola
El estrés, la ansiedad, los traumas y la depresión también pueden provocar el desarrollo de trastornos por consumo de sustancias, lo que puede crear nuevos retos para su salud mental.
Se sabe que los siguientes trastornos coexisten con la adicción:
- Trastorno bipolar.
- Ansiedad.
- Depresión.
- Trastornos de la alimentación.
- Trastorno por déficit de atención con hiperactividad.
- Trastorno por estrés postraumático.
- Trastorno obsesivo compulsivo.
- Esquizofrenia y otros trastornos psicóticos.
¿Quién puede desarrollar una adicción? Cualquier persona
Es posible que personas de todas las edades, orígenes y grupos socioeconómicos desarrollen adicciones al alcohol o a las drogas. Aunque algunos grupos son más vulnerables que otros, hay varios factores que contribuyen a la aparición de la adicción.
Genética
Las investigaciones sugieren que los genes contribuyen al riesgo de desarrollar tanto un trastorno por consumo de sustancias como otras enfermedades mentales. Los factores ambientales, como el estrés o los traumas, pueden provocar cambios genéticos. También sabemos que algunos genes se transmiten de padres a hijos. Estos cambios pueden contribuir al desarrollo de un trastorno por consumo de sustancias u otras enfermedades mentales.
Enfermedades mentales
Las investigaciones demuestran que algunas enfermedades mentales aumentan el riesgo de padecer trastornos adictivos.
Aunque pueda parecer que alivia el dolor inmediato, el consumo de drogas y alcohol suele tener efectos devastadores a largo plazo. El consumo continuado de drogas hace que el cerebro aumenta los efectos gratificantes, lo que a veces provoca el desarrollo de otras adicciones.
Las personas que padecen un trastorno de ansiedad o del estado de ánimo, como depresión o trastorno bipolar, tienen el doble de probabilidades de consumir también drogas o alcohol. Las personas con trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), trastorno antisocial de la personalidad y trastorno de la conducta, trastornos psicóticos -como la esquizofrenia y el trastorno esquizoafectivo- o TOC también tienen más probabilidades de abusar de sustancias.
¿Cómo convencer a un ser querido de que vaya a rehabilitación?
Las drogas tienen la capacidad de apoderarse por completo del juicio, los comportamientos y las prioridades de una persona. Toman el control, le quitan la capacidad de ver con claridad y de tomar decisiones racionales. Si un ser querido se niega a ir a rehabilitación puede que sientas que ya no se preocupa por ti o por su vida. Sepa que las actitudes que su ser querido tiene ahora, los comportamientos que lleva a cabo y las cosas que dice mientras está intoxicado, a menudo están fuera de su control.
Entonces, ¿cómo se puede llegar a ellos? ¿Cómo se puede convencer a alguien para que vaya a rehabilitación por su adicción? ¿Puede hacerlo? Vamos a ello.
¿Puedes convencer a alguien de ir a rehabilitación?
Convencer a alguien de ir a rehabilitación puede ser difícil. Pero en muchos casos, es posible lograrlo. Al abordar el tema con compasión y estrategia puedes ayudar a tu ser querido a recibir la ayuda que necesita. Aquí te explicamos cómo:
Infórmate
Antes de hablar con tu ser querido sobre la rehabilitación es importante que te eduques sobre el tema del abuso de drogas y la adicción. Debes llegar preparado a esta conversación con datos. Es vital conocer los síntomas del abuso de drogas. Al verificar estos signos, podrás argumentar mejor tu caso para la rehabilitación.
Entender la adicción no solo te ayudará a ser empático, sino que también te permitirá comprender los hechos para que estés mejor equipado para manejar la conversación. Investiga las opciones de tratamiento antes de comenzar la conversación para poder ofrecer soluciones.
Luego, aprende sobre los peligros del abuso de drogas y sobre la enfermedad de la adicción. Lee literatura, habla con especialistas en adicciones o asiste a un grupo de apoyo en tu área. Esto te preparará para responder a cualquier pregunta que tenga tu ser querido y para guiar la conversación con serenidad. Al reconocer que la adicción es una enfermedad y saber cómo afecta a una persona mentalmente, podrás abordar el tema de la rehabilitación con una perspectiva más comprensiva y empática.
También puede ser útil investigar las opciones de tratamiento para la adicción y saber exactamente qué sucede o qué esperar en un programa de rehabilitación. Al hacerlo, podrías reducir el miedo de tu ser querido a ir o disipar algunas de sus incertidumbres.
Planifica una intervención.
Una intervención puede ser una de las herramientas más efectivas para convencer a un ser querido de ir a rehabilitación. Esto significa que tú, junto con otros amigos y miembros de la familia, se unirán para hablar directamente con tu ser querido, explicando como el abuso de sustancias de esta persona ha afectado negativamente sus vidas. Esto puede motivar a las personas a ir a rehabilitación porque, la mayoría de las veces, no son conscientes de cómo su adicción realmente afecta a los que ama.
Planificar una intervención con anticipación es importante. Asegúrate de elegir un momento en el que tu ser querido esté sobrio y en un estado mental accesible. Habla con un profesional en adicciones en el centro de rehabilitación de tu elección para planificar una estrategia post-intervención también. Asegura un lugar en el tratamiento, coordina el pago y prepara una maleta con anticipación. Esto es importante porque, si la intervención tiene éxito, querrás llevar a tu ser querido directamente a recibir atención.
Evita las emociones y actitudes negativas.
Por mucho que la adicción de tu ser querido te haya lastimado y por muy enojado que te sientas en este momento, es importante dejar eso fuera de la intervención. Estas emociones negativas no harán que comprendan o deseen cambiar.
Más bien, hazle saber a esta persona que la intervención viene de un lugar de amor. Quieres que vaya a rehabilitación porque deseas verla saludable y feliz nuevamente. Quieres que esté a salvo. Hazle saber cuánto la amas y que no está sola. Al mismo tiempo, asegúrate de hacerle saber cuánto te ha lastimado su adicción. Asegúrate de escuchar tanto como hablas. Para que la conversación sea productiva, tu ser querido debe sentirse visto y escuchado.
Considera una intervención profesional.
Las intervenciones profesionales que involucran a alguien especializado en asesoría sobre adicciones, también pueden ser muy efectivas. Esta persona podrá guiar la conversación y asegurarse de que sea lo más productiva posible. Esta persona también puede ayudar a facilitar el proceso post-intervención, llevando a tu ser querido al programa de rehabilitación adecuado.
No esperes hasta que empeore.
Es importante asegurarte de no esperar a que tu ser querido “toque fondo”, porque podría ser demasiado tarde si “tocar fondo” significa una sobredosis. No esperes hasta que tu ser querido haya destruido su vida para intervenir. En lugar de eso, si sospechas que tu ser querido tiene un problema de abuso de drogas, haz algo al respecto lo antes posible. La adicción es una enfermedad mortal, y cuanto más tiempo una persona use drogas, mayor será el riesgo de efectos a largo plazo.
¿Qué se necesita para internar a un adicto?
Si tu ser querido no quiere escuchar o no está listo para dejar de usar, todavía hay pasos que puedes tomar para obtener la ayuda que necesita. Si eres el padre de un adolescente adicto puedes inscribir a tu hijo en un programa de rehabilitación en contra de su voluntad. Si tu ser querido tiene problemas con la ley o representa un peligro inminente, puede ser legalmente obligado a recibir tratamiento sin consentimiento a través de una rehabilitación ordenada por la corte o una internación involuntaria.
Incluso, si tu ser querido no quiere recibir ayuda, aún puede beneficiarse de ella. Es un mito común que los adictos deben quererlo. La verdad es que, al principio, muchas personas que ingresan a tratamiento no lo desean. Están renuentes, distantes, escépticas. Sin embargo, con el tiempo, sus barreras se rompen. De hecho, aquellos que son obligados a ir a rehabilitación tienen tasas de éxito notablemente similares a las de aquellos que ingresan voluntariamente.
Antes de obligar a tu ser querido a ir a rehabilitación o investigar métodos de inscripción involuntaria, intenta tener una conversación con él o ella. Intenta convencerle de los peligros del abuso de drogas y los beneficios del tratamiento profesional. Siempre es mejor establecer confianza, empatía y apoyo cuando sea posible, para ayudar efectivamente a una persona a ingresar a la rehabilitación de drogas.
Los trastornos por uso de sustancias son enfermedades crónicas caracterizadas por el uso incontrolable de drogas o alcohol a pesar de las consecuencias dañinas. Hay varias razones por las cuales las personas no buscan tratamiento, incluyendo la negación, la creencia de que pueden dejarlo cuando quieran, el miedo, el estigma asociado al abuso de sustancias, preocupaciones de privacidad, el costo del tratamiento, la ubicación geográfica del centro de tratamiento, problemas de disponibilidad de admisión y más.
Cómo ser querido de alguien que lucha contra la adicción, puedes ser capaz de convencerlo de recibir tratamiento, pero requerirá paciencia y esfuerzo.
Entonces, ¿qué se necesita para internar a un adicto? Cómo lograr que alguien vaya a rehabilitación
La mejor acción que puedes tomar ahora antes de intentar una internación involuntaria es ayudar a tu ser querido a buscar tratamiento por su cuenta. Si aún no están listos, puedes explorar opciones para ellos. Busca centros de tratamiento que puedan atraerles en términos de ubicación o los servicios proporcionados, tales como servicios legales, consejería familiar, ayuda educativa, tratamientos médicos y servicios de salud mental.
También puedes intentar que su médico les ayude o pedir a un profesional de la salud que hable con ellos sobre la adicción. Un clínico de rehabilitación puede proporcionar una intervención, que implica un intento organizado de confrontar a tu ser querido sobre cómo su abuso de alcohol o drogas ha afectado a todos los que los rodean.
En Hacienda del Lago contamos con los mejores programas y especialistas para el tratamiento de la adicción. Contáctenos hoy para preguntar por nuestros servicios. Nosotros te podemos ayudar a llegar a tu ser querido y a brindarle la atención que se merece.
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